La Cuarta Brigada y la Séptima División del Ejército Nacional, cuya operación se concentra en el departamento de Antioquia tienen como hogar la capital de la región. Más específicamente, esta instalación militar se encuentra en uno de los sectores más concurridos de la ciudad.
Ubicada en la comuna 11 (Laureles) justo al frente de la Unidad Deportiva Atanasio Girardot, sobre la calle 50 de la ciudad se encuentra el cuartel desde el cual se vela por la seguridad del departamento.
LEA TAMBIÉN

Maleta abandonada afuera de la Brigada
Como se mencionó, por la presencia del sector deportivo por antonomasia de Medellín, el centro comercial El Diamante y su posición estratégica entre la Avenida Colombia y la Avenida 80, dos de los corredores principales de la capital de Antioquia, la Cuarta Brigada se encuentra en un punto álgido en cuanto a tránsito se refiere.
Cuarta Brigada del Ejército Nacional. Foto:Archivo particular.
Por eso, las labores de patrullaje y vigilancia en intermediaciones de esta zona de las instalaciones militares se han caracterizado por ser siempre las más estrictas y minuciosas, para garantizar la protección y seguridad del cuartel y de las zonas residenciales contiguas.
Aún con el patrullaje ininterrumpido de los soldados de la Séptima División del Ejército, en la tarde del sábado 5 de julio hubo un episodio que llevó a activar todos los protocolos necesarios para controlar una posible amenaza contra la instalación militar.
Justo sobre la calle 50, conocida localmente como la Avenida Colombia, un hombre dejó abandonado un objeto extraño que llevó a que, sobre las 3:30 de la tarde, el propio alcalde de Medellín, Federico Gutiérrez, informara a través de sus redes sociales que en la Brigada se habían activado los protocolos de seguridad establecidos para descartar una amenaza de bomba a pocos metros de uno de los ingresos de la sede y unidad operativa del Ejército en Antioquia, compuesta por ocho batallones, un grupo de caballería y dos Gaulas Militares,
En su cuenta de X, Gutiérrez informó: “Dentro de las revisiones y monitoreos que hace el Ejército alrededor de las instalaciones de la Cuarta Brigada, se generó una alerta por una maleta abandonada en el sector. Personal del Ejército activó el protocolo de seguridad, a prevención han acordonado el lugar, alertando a las unidades de antiexplosivos quienes han hecho las verificaciones pertinentes“.
El alcalde también indicó que: “Si bien mediante la verificación del robot antiexplosivos no se evidenció la existencia de algún artefacto explosivo, se sigue, por prevención, adelantando el protocolo”.
La zona fue acordonada para las inspecciones correspondientes del objeto. Foto:Cortesía.
En ese sentido, se interrumpió el tráfico vehicular y peatona en su totalidad sobre la Avenida Colombia por algo más de una hora. Finalmente, los operarios del Ejército establecieron que el maletín abandonado frente a la Brigada no contenía explosivos, por lo que se procedió a su remoción y se rehabilitó el tránsito en la zona.
Sin embargo, la alerta emitida por el primer mandatario de la ciudad y el cierre repentino en este corredor principal de la ciudad inquietó a los habitantes de la ciudad con respecto al panorama de seguridad considerando que la Cuarta Brigada no ha sufrido un ataque desde el año 1996.
LEA TAMBIÉN

Protocolo antiexplosivos
A pesar de que la amenaza fue descartada por las autoridades, EL TIEMPO conoció detalles exclusivos de lo que sucedió en la tarde del sábado y del accionar del Ejército para descartar un posible atentado en la Brigada.
Desde el Ejército Nacional relataron: “Uno de los soldados encargados de verificar la zona de las inmediaciones de la Brigada evidenció que un señor abandonó una maleta. El soldado le alcanzó a gritar para llamarle la atención, pero el hombre hizo caso omiso y se fue”.
La fuente del Ejército explicó que, tras la alerta emitida por el soldado, se activó el primer protocolo en la zona, que implicó el la interrupción total del tránsito en la zona y el uso de un canino para la inspección preliminar de la maleta abandonada.
El canino entrenado para detectar explosivos o sustancias ilícitas se sentó en señal de alerta. Foto:Cortesía.
“Con un canino entrenado se trató de identificar si se trataba de un artefacto explosivo. Tras olfatear la maleta por unos segundos, el perro se sentó lo cual indicó una alerta de posible explosivo“, explicó la fuente del Ejército Nacional.
A raíz de la reacción del canino, se convocó al grupo antiexplosivos Marte, quienes a través del robot mencionado por el Alcalde de Medellín y con la verificación de uno de los uniformados de este grupo, vistiendo un traje antiexplosivos, finalmente pudieron verificar el contenido de la maleta.
Desde el Ejército revelaron que al interior de esta maleta se halló una pequeña cantidad de pólvora (lo cual hizo reaccionar al canino) además de elementos como proteína y lentejas.
El grupo Marte de las Fuerzas Militares procedió con las verificaciones definitivas del objeto. Foto:Cortesía Denuncias Antioquia.
De ese modo, se descartó el riego de explosivos en la zona y se levantó el acordonamiento en las inmediaciones de la base del Ejército en Antioquia tras algo más de una hora de operaciones por parte de los expertos de las Fuerzas Militares.
A pesar de haber desestimado el riesgo, el episodio está bajo investigaciones de la inteligencia del Ejército Nacional para individualizar al responsable.
NICOLÁS TAMAYO ESCALANTE
Periodista de Nación, en Medellín.
Otras noticias:
Así cayó ‘El Costeño’. Foto: