El pasado 1 de noviembre se celebró el tercer día de las fiestas del Chalán y la Ganadería, en el municipio de Santo Domingo, Antioquia. En dicha fecha, en el pueblo se realiza una cabalgata de disfraces en las que grupos e individuos se personifican a gusto para conmemorar esta tradición.
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Sin embargo, la celebración de este año se vio empañada por un episodio que trascendió la tradición y se viralizó rápidamente en redes sociales.
Una funcionaria de la Fiscalía 41 del municipio se personificó como guerrillera del ELN; la mujer portó camuflado del Ejército Nacional en conjunto con emblemas de la organización criminal en los hombros y una pañoleta con los colores de la guerrilla que le cubría medio rostro.
La mujer, identificada como Marta Lilian Calderón Zuluaga, secretaría del despacho de dicha sede de la Fiscalía, fue grabada por oficiales de la Policía de la región, quienes al reconocerla, le solicitó en repetidas oportunidades que bajara del caballo en el que participaba de la cabalgata y que se retirara los emblemas del ELN, puesto que esto constituía un delito.
La servidora pública se negó a retirarse las prendas en repetidas oportunidades, argumentando que simplemente se trataba de un disfraz. Horas después, el alcalde de Santo Domingo anunció que se le había impuesto una sanción a la funcionaria debido a que su actuar había sido mal visto por las personas del municipio.
¿Un proceso previo?
Posterior a la viralización del hecho, una fuente de otro municipio de Antioquia le aseguró a EL TIEMPO, que Calderón ya había sido trasladada de dicha región del departamento por actuaciones que irían en contra de su posición como funcionaria pública.
Según esta fuente, Marta Calderón habría tenido un proceso disciplinario en el pasado en el municipio del que es oriunda. Se trata de San Roque, Antioquia, otro municipio del Nordeste antioqueño ubicado a tan solo una hora de Santo Domingo, municipio en el que hoy en día actúa como secretaria Fiscal.
La fuente aseguró que: “de San Roque, Antioquia, la sacaron esposada por hacer política y tiene denuncias por acoso moral y bullying a varias personas”.
De San Roque, Antioquia, la sacaron esposada por hacer política y tiene denuncias por acoso moral y bullying a varias personas
Este diario investigó y estableció que, en efecto, la funcionaria de la Fiscalía, cuyos estudios de derecho fueron realizados en la Universidad Santo Tomás de Bogotá, de la que se graduó en 2016, es oriunda del municipio de San Roque.
Además, a Calderón le aparece un proceso con fecha de mayo de 2023, alojado en la Comisión Seccional de Disciplina Judicial de Medellín, en el que fue demandada en anónimo por un caso categorizado como ’empleados’, el cual coincidiría con lo revelado a EL TIEMPO por la fuente del municipio.
Compulsa de copias
El pasado martes 5 de noviembre, la Comisión Nacional de Disciplina Judicial, a través de su Seccional en Antioquia, abrió un proceso contra Calderón para establecer la relevancia disciplinaria de la conducta de la mujer.
Según esta corporación, Calderón habría incurrido en la conducta consagrada en el numeral 6 del artículo 154 de la Ley Estatutaria de la Administración de Justicia, referente a actividades que minan la confianza de los ciudadanos y comprometen la dignidad de la justicia. La decisión fue anunciada por el presidente de esta corporación, el magistrado Alfonso Cajiao Cabrera.
Este proceso se suma a los dos comparendos que recibió Marta Calderón por parte de la Policía Nacional por violar el artículo 35 del código de Policía, específicamente en sus numerales 1 y 3, en los que se establecen los comportamientos que afectan las relaciones entre las personas y las autoridades.
Marta Lilian Calderón Zuluaga incurrió en “irrespetar a las autoridades de Policía” e “Impedir, dificultar, obstaculizar o resistirse a procedimiento de identificación o individualización, por parte de las autoridades de Policía”.
NICOLÁS TAMAYO ESCALANTE
Periodista de Nación, en Medellín.