Óscar Camargo Ríos, alias Pichi, el narcotraficante más peligroso de Bucaramanga, conocido como el ‘Pablo Escobar’ de la ciudad, se fugó de la residencia en la que cumplía detención domiciliaria en Medellín.
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Los hechos ocurrieron en la tarde del jueves 10 de octubre; en un primer momento, funcionarios del INPEC acudieron al domicilio donde se encontraba recluido el capo bumangués para una visita de control.
Sin embargo, horas después de la visita, el brazalete vinculado a Camargo emitió una alerta de transgresión, por lo que los miembros del INPEC regresaron al domicilio ubicado en una unidad del exclusivo sector de El Poblado. A su llegada ‘Pichi’ ya no se encontraba en el lugar.
Los movimientos previos a la fuga
EL TIEMPO tuvo acceso a los registros del INPEC en los que se deja constancia de todos los movimientos relacionados al domicilio donde se encontraba ‘Pichi’.
En dichos registros, hay constancia de hasta catorce salidas de Camargo Ríos entre el 14 de julio y el 6 de agosto. En total, son 14 salidas del domicilio.
En el acta, a la que este diario tuvo acceso, también registran alertas de transgresión emitidas por el brazalete previamente. Además de dos constancias por cambio de domicilio no autorizado entre el 9 de agosto y el 12 de agosto.
Advertencia del Inpec
El pasado 13 de julio, el INPEC remitió al Juzgado Tercero de Ejecución de Penas y Medidas de Seguridad de Medellín una documento en el que advertía que alias Pichi, se encontraba clasificado en el “NIVEL UNO DE SEGURIDAD”, una clasificación que se asigna a los reclusos que representan “riesgo especial a la seguridad personal de la misma persona privada de la libertad(PPL), otros PPL, servidores, seguridad del Establecimiento de Reclusión de Orden nacional”, se explica en el documento.
Además, en la misiva también se advertía que Camargo Ríos ya se había fugado de la Cárcel de Girón, Santander, en el año 2015.
“En el 2015 se fugó, cuando se encontraba en diligencia judicial en hospital saltó por una de las ventanas del establecimiento y emprendió la huida”, señala el Inpec en la carta, que concluye haciendo énfasis en las condiciones especial de alto perfil y nivel de riesgo que alias Pichi representa para la seguridad y el orden público del país.
Este mismo jueves, en horas previas a la fuga de Camargo, se había ordenado revocar la decisión judicial que había posibilitado que ‘Pichi’ cumpliera su condena en detención domiciliaria.
