Mediante un preacuerdo con la Fiscalía General de la Nación, el intendente en retiro Carlos Augusto Fernández Raigosa, aceptó haber hecho parte de una red de trata de personas, por lo que fue condenado a siete años de prisión.
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De acuerdo con información recopilada por la Dirección Especializada contra las Violaciones a los Derechos Humanos de la Fiscalía, este hombre captaba jóvenes en Medellín y coordinaba su traslado a Francia, donde eran explotadas laboral y sexualmente.
El exintegrante de la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá, entre los años 2022 y 2023, mientras estuvo activo y desempeñó labores en la estación La Candelaria, en el centro de la capital antioqueña, contactó a varias mujeres y les ofreció trabajar como modelos en Francia, con un sueldo fijo.
“Como requisito para viajar les pedía grabarse en video o tomarse fotografías en ropa interior. Este material era enviado a los cabecillas internacionales que se encargaban de dar el aval“, dice la Fiscalía.
Estación de Policía La Candelaria, Medellín
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Las jóvenes que recibían la aprobación de la estructura tomaban un vuelo en el aeropuerto de Jose María Córdova de Rionegro con rumbo a Madrid o Barcelona (España), de donde eran trasladadas a Marsella, Niza y Montpellier (Francia).
En territorio francés las mujeres se percataban que los registros fílmicos y fotográficos habían sido publicados en comunidades virtuales donde se ofrecían servicios sexuales, los cuales terminaban ejerciendo para cubrir el pago de una deuda que les imponía la organización delictiva.
Además de la condena, un juez penal especializado de Medellín le impuso una multa equivalente a 1.750 salarios mínimos legales mensuales vigentes.
